El juego para Fido es importante pero a veces se vuelve demasiado exagerado. He aquí cómo y por qué es importante enseñarle a su perro cuando el juego ha terminado.
Jugar es una actividad muy importante para nuestros amigos de cuatro patas, ya que gracias al juego Fido puede socializar con otros animales y personas.
Además, jugar con tu amigo peludo es muy útil para fortalecer el vínculo con Fido. Sin embargo, corresponde al hombre decidir cuándo debe comenzar el juego pero sobre todo cuándo debe terminar.
En el siguiente artículo veremos juntos Cómo enseñar al perro cuando el juego ha terminado. y por qué es importante hacerlo.
Cómo enseñar a tu perro a dejar de jugar
Ya sea un cachorro o un adulto, eso es mucho jugar es importante para nuestro amigo de cuatro patas.
Gracias a las actividades lúdicas, el perro puede expresar todas sus energías. Sin embargo, a veces el nuestra pequeña bola de pelo podría exagerar en el juegovolverse hiperactivo, agresivo o incluso excitarse demasiado al obsesionarse con un solo juguete, como la pelota.
Por esta razón es muy importante enseñarle a tu perro cuando termine el juego. Además, entrenar a Fido para que deje de jugar también puede ser útil cuando necesitamos hacer otra cosa, incluso en su presencia, como limpiar la casa o trabajar en smart working.
Así que veamos juntos cuáles son los pasos para detener a nuestro amigo de cuatro patas cuando se exceda en el juego o cuando sea hora de terminar de jugar por otros motivos.
1. Larga sesión de juego
Para enseñar a tu amigo de cuatro patas cuándo es el momento de dejar de jugar, conviene ejecutar una sesión de juego larga con Fido, haciendo que se canse tanto como sea posible. Cuando el perro cansado se relaja en el suelo, es hora de pasar al segundo punto.
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2. Dar la orden «basta»
El segundo punto consiste enEnséñale al perro el comando «basta», «hecho» o «bien». o cualquier otro término que quieras usar para conectar la palabra al final del juego.
En este punto, pronuncia el término elegido y oculta el juego de Fido. Si tu amigo peludo sigue inquieto por querer jugar, ignoralo.
También es recomendable que los demás miembros de la familia hagan lo mismo, de lo contrario el perro nunca aprenderá a relacionar la orden con la acción, en este caso a no jugar.
3. La recompensa
Si tu amigo de cuatro patas deja de jugar y se acuesta o se sienta, utiliza el refuerzo positivo. Así que elógialo y dale una golosina, que puede ser una palmadita o una galleta para perros.
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4. Deja que el perro juegue solo
Una vez que nuestro amigo de cuatro patas ha aprendido el comando, es necesario darle la oportunidad de que Fido juegue solo incluso si el tiempo de jugar ha terminado para nosotros.
Así que ofrecemos a nuestro amigo peludo un juguete relajante que estimule su mente, como Kong para perros, u otros juegos similares, donde podrá introducir golosinas en su interior.
No olvidemos que las actividades lúdicas son importantes para nuestros peludos y que aunque estemos ocupados, el perro necesita “desperdiciar” su energía.