En los gatos existe una patología llamada Síndrome Orofacial: aquí están las causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento del FOPS.
En los felinos existe una patología particular que se denomina Síndrome orofacial: es una enfermedad caracterizada por la automutilación del hocico y la lengua combinada con otros signos conductuales que indican malestar/dolor en el hocico (por ejemplo movimientos exagerados de lamer y masticar). La peculiaridad es que la molestia y el autotraumatismo que sufre el gato son desproporcionados con respecto a cualquier posible causa de dolor (por ejemplo, problemas dentales). Se cree que la enfermedad es similar a neuralgia trigeminal en los humanos, una forma de dolor neuropático.
Síndrome orofacial en gatos: causas y síntomas
L’Síndrome orofacial (acrónimo FOPS) se caracteriza por incomodidad y dolor en la cara y de la boca. LA síntomas más frecuentes son:
- lamiendo el hocico exagerado
- masticar vacío
- el gato se toca la boca con las patas, como para quitarle algo
- autotraumatismo en lengua y labios
Se ha visto que normalmente el dolor es mayor en un lado y que es episódico. El dolor y los síntomas relacionados pueden desencadenarse por movimientos de la lengua, por ejemplo, al comer, beber agua o aseo. Los ataques pueden durar de unos minutos a varias horas y pueden estar precedidos por comportamientos ansiosos.
Algunos gatos dejan de comer: la anorexia en este caso provoca luego otros problemas, como la lipidosis hepática. FOPS se ve más en los gatos birmanos, sin embargo, se puede diagnosticar en cualquier otra raza, incluidos los cruces. Se ha informado con cierta frecuencia en los siameses, tonquineses, burmilla y en los de pelo corto.
Se cree que FOPS es uno enfermedad hereditaria. También puede aparecer a cualquier edad, aunque los primeros síntomas suelen aparecer en el momento de la dentición. Los factores que pueden empeorar el Síndrome Orofacial son:
Ahí causado por FOPS es una forma de dolor neuropático similar a la neuralgia del trigémino en humanos: en la práctica, el dolor es causado por un procesamiento anormal y exagerado de la información relacionada con el dolor recibida del sistema nervioso. En otras palabras: el sistema nervioso procesa mal y exageradamente los estímulos dolorosos, amplificando el dolor. El nervio trigémino transmite información sensorial: en FOPS, probablemente, el nervio trigémino no funciona correctamente y cuando recibe una sensación dolorosa (dientes o problema dental, por ejemplo), procesa y devuelve una respuesta dolorosa exagerada.
Síndrome orofacial en gatos: diagnóstico y tratamiento
No hay ninguno prueba de diagnóstico que te puede decir: “Sí, tu gato tiene Síndrome Orofacial”. El diagnóstico se realiza mediante la señalización, la anamnesis, el examen de los síntomas típicos, la exclusión de todas las demás causas posibles y la identificación de los factores desencadenantes.
Los análisis de sangre, las radiografías y un examen neurológico son pruebas complementarias para descartar otras posibles causas de FOPS. En algunos casos, se solicita una resonancia magnética. Entonces, para excluir o confirmar la presencia de enfermedad periodontal y FORL, puede ser necesario realizar una inspección minuciosa de la boca bajo anestesia. También se investigará el estrés ambiental: presencia de otros gatos o animales que conviven, número de cajas de arena, espacio de descanso y alimentación resguardado, puntos de entrada y salida, interacciones con sus humanos.
En cuanto a tratamiento del Síndrome Orofacialrequiere varios pasos. Antes de poder reducir el dolor y eliminar los desencadenantes, será necesario evitargato autotrauma, para lo cual será necesario un collar isabelino o una venda en la pierna. En este punto, se debe tratar de identificar las enfermedades dentales desencadenantes preexistentes y las tensiones ambientales, y actuar en consecuencia.
Para reducir el dolor, su veterinario puede recetarle varios medicamentos: los AINE y los opioides no siempre son efectivos para el dolor neuropático. Debido a esto, su veterinario puede recetarle otros medicamentos para el dolor neuropático, como gabapentina, fenobarbital, carbamazepina o amitriptilina, un antidepresivo. Evidentemente se trata de medicamentos particulares que siempre y sólo deben ser utilizados bajo estricta supervisión veterinaria, queda terminantemente prohibido el bricolaje con estos.
El problema suele ser crónico, así que prepárate para tener que tratar al gato de por vida, modificando también las terapias a medida que avanza la enfermedad y las terapias antiguas ya no surten efecto. Dado que FOPS es hereditario, los gatos afectados deben excluirse de la reproducción.
Esta información no reemplaza en ningún caso una visita veterinaria. Le recordamos que Petsblog no proporciona nombres y/o dosis de medicamentos bajo ninguna circunstancia y por ningún motivo.
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